Piura, 09/10/2025 El Órgano de Control Institucional (OCI) de la Dirección Regional de Salud (Diresa) de Piura detectó múltiples irregularidades en los procesos de adjudicación de plazas bajo el régimen CAS desde el año 2022. Según el informe, varios trabajadores fueron contratados sin cumplir los requisitos mínimos exigidos, mientras que otros obtuvieron cargos sin haber acreditado experiencia como personal CAS Covid. La Contraloría advirtió que estos hechos comprometen la transparencia y meritocracia en la selección del personal de salud regional. El informe señala que, durante el proceso de reasignación CAS I 2022, se adjudicaron 249 plazas, de las cuales 58 fueron otorgadas a postulantes que no demostraron los nueve meses de experiencia exigidos. Las bases del concurso establecían que los aspirantes debían haber trabajado como personal CAS Covid hasta el 31 de julio de 2022, con una antigüedad mínima desde el 1 de noviembre de 2021, requisito que no se cumplió en decenas de casos. Entre las irregularidades más graves, el OCI identificó que un postulante, Frank Ruiz Villacorta, obtuvo simultáneamente dos cargos: uno como técnico en enfermería y otro como piloto de ambulancia. Pese a que la comisión auditora solicitó los expedientes correspondientes, la Diresa no presentó la documentación requerida, lo que impidió verificar la legalidad de las contrataciones. Además, se hallaron expedientes incompletos sin títulos profesionales, certificados de estudios o licencias de conducir. Las observaciones también alcanzan los concursos de 2023 y 2024, donde se evidenció que 227 personas fueron contratadas sin concurso público y que persistieron las adjudicaciones a personal sin puntajes válidos ni experiencia acreditada. La Contraloría recomendó a la Diresa Piura implementar medidas correctivas inmediatas para garantizar procesos de selección justos, transparentes y alineados con la normativa vigente.