Gustavo Adrianzén ha insistido en que el Gobierno de Perú podría considerar retirarse de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), argumentando que esta «ha excedido sus competencias». Esta declaración surge después de que el organismo internacional rechazara la posible aprobación del proyecto de ley sobre crímenes de lesa humanidad, conocido como «Ley de Amnistía».

El Gobierno y el Congreso de Perú ya han respondido oficialmente a este asunto mediante una carta dirigida a la Corte IDH. En la misiva, el Estado expresa su rechazo a la intervención de la Corte y reafirma que Perú es una nación democrática con mecanismos internos para regular las normas promulgadas.

Esta postura no resultó sorpresiva, ya que el primer ministro había adelantado la posición del Estado en una entrevista previa. Adrianzén declaró a Canal N que «hay una corte de justicia supranacional que está excediendo de una manera insólita sus facultades y está maniatando a los poderes del Estado. Esto, un Estado soberano que se rige por la separación de poderes, no lo puede admitir». También enfatizó que aunque el Gobierno puede tener diferencias internas sobre leyes provenientes del Congreso, no pueden permitir que una entidad supranacional dicte acciones específicas a los poderes del Estado.

Adrianzén no descartó la posibilidad de un eventual retiro de la Corte IDH. «En un escenario como este, no estamos en condiciones de descartar ninguna acción de gobierno, pero aquella que se tome será resultado de un profundo análisis y reflexión», agregó.

El 15 de julio, el titular de la PCM reiteró la posición del Estado, señalando que la reciente resolución de la Corte IDH fue invasiva. «He declarado anteriormente que no había voluntad del Gobierno de retirarnos de la Corte, pero hasta entonces, la Corte no había sido tan invasiva como en la última resolución, donde ordenaba a los poderes del Estado actuar de una manera específica», comentó a RPP.

Además, Adrianzén explicó que no está de acuerdo con la postura de la Corte IDH y señaló la falta de diálogo en este caso. «El diálogo se ha dado siempre, pero la Corte no ha dado ninguna oportunidad. Ha declarado desacato y ha ordenado a los poderes del Estado actuar sin tener facultad alguna para hacerlo», dijo.

Cuando fue consultado si el Gobierno evalúa retirarse de la Corte IDH, respondió: «Probablemente, sí. En este tiempo sí, probablemente, haya necesidad de evaluar todo aquello. De momento no está en la agenda, pero no veo por qué no», concluyó.