han transcurrido 5 años desde la tragedia del desborde del río y las miles de familias del Bajo Piura que lo perdieron todo, siguen padeciendo las mismas necesidades como el primer día; sin agua potable, sin alcantarillado, viviendo en medio del desierto hasta donde tuvieron que desplazarse para empezar de nuevo. En todo ese tiempo, lo único que han recibido han sido promesas tanto del Gobierno Central como del Gobierno Regional.

Hasta el expresidente Martín Vizcarra llegó tantas veces para prometerles viviendas dignas; sin embargo, todo quedó en simples promesas, pues eso “de pisar el acelerador” jamás funcionó en nuestra región y seguimos con las mismas deficiencias de toda la vida, vulnerables ante cualquier evento lluvioso. 

Ahora que han pasado 5 años, casi nada ha mejorado para estas familias que siguen viviendo en deplorables condiciones, más aún en esta pandemia que han tenido que sobrevivir en medio de múltiples carencias. Sin embargo, ya vemos a los candidatos que como siempre tomarán como caballito de batalla el desborde del río ofreciendo hasta lo imposible, con el único propósito de llegar al poder.

Por eso, ahora que se avecinan los comicios regionales y provinciales, la población tiene que evaluar bien los planes de gobierno para emitir un voto informado y no dejarse engañar por los candidatos que en época de campaña sí llegan hasta esas poblaciones olvidadas, pero que luego en el poder ya no se acuerdan de ellos.