El secretario regional anticorrupción, Jaime Távara, indicó que en el colegio José María Arguedas (caserío Succhirca) la empresa abandonó la obra y cobró el 75% de ejecución financiera, cuando en físico solo se ha construido el 46% de esta infraestructura.

“Ahora se está ejecutando el saldo de obra con una nueva empresa. Los trabajos recién han empezado. Esa obra debió haber terminado en el 2017”, explicó Távara.

A esto se suma que en la institución educativa del caserío Nuevo San Martín la obra también fue abandonada y recién ha sido retomada el uno de mayo de este año.

“En el caserío Nuevo San MartÍn, en la institución educativa también se inició la obra en el 2015 y aún falta mucho para culminar la obra. Además, el 27 de marzo del 2017 hubo un deslizamiento del cerro colindante al colegio y todo el material del cerro prácticamente colmató varios ambientes de la infraestructura nueva y después de un año y medio están recién retirando el material”, denunció.

Jaime Távara informó que en la localidad de Siclamache ubicada en Sondorillo-Huancabamba también se conoce, a través de los padres de familia, que la obra de un colegio está abandonada.

“Además de la obra de Siclamache, también tenemos conocimiento de que en Sondorilo hay otros cinco colegios con problemas”, refirió Távara.

Cabe indicar que todas estas obras se encuentran en la jurisdicción de la Subgerencia Morropón-Huancabamba, motivo por el cual Távara sostuvo que hay negligencia o descuido por parte de los funcionarios de ese sector al no monitorear estas obras.

Datos

* La construcción de la I.E. José María Arguedas y la del caserío Nuevo San Martín inició en el 2015 y aún no se ha culminado.

* Jaime Távara aseguró que esta semana una comisión visitaría los ochos colegios para conocer el avance que registran.